Del Kilimanjaro al Monte Kenia pasando por el ecuador

Parque Nacional de Amboseli, 15 de septiembre

El día de hoy era un día básicamente de viaje desde Amboseli a la ladera del Monte Kenya cruzando más de medio país y la línea del ecuador. Estos desplazamientos largos aunque son un poco aburridos, sí es cierto que nos vienen bien para descansar y coger fuerzas después de 3 días durmiendo entre 3 y 6 horas.

Nos levantamos a las 6,30 de la mañana un día más para ver si hoy teníamos la suerte de poder ver el Kilimanjaro despejado, y así ha sido. Según hemos abierto la cremallera de la tienda de campaña, justo enfrente de nosotros estaba el imponente Kilimanjaro con sus casi 5900 metros de altura dándonos los buenos días. Ni el mejor de los hoteles podía competir con estas vistas. Después de una sesión de fotos y el fantástico desayuno preparado por Charles con crépes, salchichas, huevos fritos, tostadas y café, era el momento de despedirnos de Amboseli y salir en ruta hacia el Monte Kenya. Un diez para nuestro campamento, las tiendas de campaña eran comodísimas y limpias. Firmamos ya si todos los sitios donde vayamos a dormir son así.

Por el camino, aparte de disfrutar de los paisajes Keniatas, hemos tenido que parar varias veces por el problema de la rueda que íbamos arrastrando desde el pinchazo de ayer. Paul nos ha dicho que cuando lleguemos a Nairobi comprarán unas ruedas nuevas para que no tengamos más problemas. De todos modos este inconveniente no nos ha venido del todo mal, ya que hemos parado en algunos sitios y hemos podido disfrutar de algunas vistas increíbles.

La anécdota del día ha venido cuando Paul nos ha dicho que bajáramos en una especie de restaurante para turistas porque iba a rellenar el depósito. Allí las chicas han entrado a ver la tienda y cuando hemos salido Paul no estaba. Diana estaba preocupada porque todo su equipaje estaba dentro de la furgoneta y Javi también. No había de que preocuparse, en media hora habían vuelto ya a por nosotros. Eso sí, la tensión de que nos habían dejado tirados la hemos tenido, aunque por supuesto los Keniatas del restaurante decían eso de "Hakuna Matata", es decir que no había problema y nos podíamos quedar allí. 

Del desértico Amboseli el paisaje se ha ido transformando hasta convertirse casi en un bosque tropical. En total han sido más de 10 horas de coche que hemos aprovechado para descansar y coger fuerzas. A mediodía hemos parado en Nairobi donde hemos comido en un restaurante para keniatas (éramos los únicos turistas) y hemos probado el Ugali, una especie de masa blanca sin sabor ninguno que la gente de aquí usa como nuestro pan. En Nairobi hemos recogido a nuestro guía para los dos próximos días, Ken, un chico joven que irá con nosotros hasta Ninyuki.

Ya con la noche caída hemos llegado a Ninyuki donde pasaremos dos días a los pies del monte Kenia. El hotel es muy sencillo, pero al menos está relativamente limpio, y al fin y al cabo con lo cansados que llegamos de todo el día poco nos ha importado. Eso sí, nos han pedido que no salgamos del hotel por lo que pudiera pasar.

A las 20,30 hemos bajado a cenar y Paul nuestro conductor, se nos ha unido un poco después. La cena ha sido una vez más huevos, salchichas, sandwiches de pollo y patatas. Aquí el nivel de colesterol nos va a subir por las nubes. Tenemos que decir a favor de la comida keniata que es muy similar a la española. A las 22,30 ya estábamos cada uno en nuestra habitación durmiendo. Mañana visitaremos el monte Kenia, el ecuador y unas cuevas que fueron protagonistas de las guerras entre Keniatas e Ingleses por la lucha de la independencia.